LA HISTORIA DE UN ILUSTRE PROFESOR DESDE LA ADMIRACIÓN DE SU HERMANO

Para revivir la historia de un cuentista, hay que escuchar a otro cuentista, que sepa contar bien el cuento sobre su hermano, el emérito escritor JAIRO MERCADO ROMERO.

Como asunto del que quiere saber para contarle a otros, hay que subir escalones, esgudriñar canales y escultar en las memorias de los celulares de unos amigos que conduzcan a otros y transitar de un pueblo a una ciudad y finalmente esperar que aterrice un avión. Invitarlo a tomar un café en pleno aeropuerto y verle como se ilumina su rostro regresando a la niñez, hablar de las dificultades y escaceses con que se construyó la gloria. Son dos amigos, cómplices hermanos que con diferencia de 4 años caminaron juntos como siameses de una misma aventura.

Quizo el Círculo Literario de Educadores Pensionados -CLEP- rendir un homenaje a este hombre, que invadió con el gusto a la lectura y condujo a un grupo de hombres y mujeres tambien educadores a registrar su memoria de manera constante en el círculo con su JAIRO MERCADO ROMERO.

Así que llegado el 16 de mayo, nos dimos cita en la sede de Cootradecun. Allí donde las directivas han entendido el valor de nuestros tumbos de poetas, cuentistas, cronístas sin mirar que filiación política se tiene. Extendiendo una vocación cultural propia de docentes. Ellos nos cedieron el espacio que merecen las letras.

El recuerdo de las anéctodas de la vida de Jairo en esa corriente juvenil, no negó la necesidad de sonreir ante tantas historias juntas, la afloración a los versos, al dibujo de la tierra de Ovejas, Barranquilla, Cartagena y Bogotá en los trazos poetarios de Ramón Mercado Romero.

Como testimonio de éste inolvidable acontecimiento, dejamos la constancia en las siguientes pruebas:

Lectura de Ramón Mercado Romero

Lectura de Ramón Mercado Romero

Lectura de Rosaura Mestizo Mayorga